Esta semana se hizo viral la noticia sobre el desarrollo de una Luna artificial, fabricada por el gobierno chino, sin embargo muchos internautas siguen con la duda de para que realmente servirá este proyecto.
Cuando se anunció que China había desarrollado una “Luna falsa“, algunos incautos pensaron que se trataba de una especie de nave espacial que replicaría la apariencia de nuestro satélite, pero no es así.
Si deseas conocer más acerca del lanzamiento de la luna artificial planeado desde el 2018, a continuación las noticias te comparte la finalidad de este proyecto que podría ayudar a la exploración espacial y revolucionarla en más de una forma.
Se trata de una instalación de investigación científica, dentro de sus paredes se están dando los últimos detalles a una especie de pequeño simulador que puede replicar las condiciones físicas y climáticas de la Luna. Es decir, se trata de un pequeño dispositivo acondicionado para simular las condiciones de la Luna.
¿Qué es la luna artificial china y cómo se desarrolla?
Para elaborar esta luna falsa, en primer lugar, los científicos chinos desarrollaron tecnología de campos magnéticos, bajo los mismos principios que hace 25 años habían permitido hacer “levitar” a una rana en Reino Unido.
La tecnología que permitirá funcionar a esta innovación china fue desarrollada en 1997 por el científico británico Andre Geim. Se trata de un tipo de levitación que se consigue al aplicar un campo magnético externo a los átomos de un objeto.
Con esto, los electrones modifican su movimiento, produciendo su propio campo magnético para oponerse al externo. Normalmente se consigue con ayuda de magnetos, que tienen que ser suficientemente fuertes como para que la fuerza magnética de repulsión entre él y el campo de los átomos “venzan” la gravedad y permitan levitar al objeto.
Gracias a su tecnología basada en el magnetismo se podrá replicar las condiciones de la Luna en una cámara de vacío de 60 centímetros. De acuerdo con medios locales, la Luna falsa china se pondrá a levitar este mismo año en Xuzhou, en la provincia de Jiangsu.
Si todo sale bien, la cámara podrá mantenerse flotando indefinidamente, lo que permitirá llenarla de rocas y polvo para imitar la superficie lunar.
China tiene planeado lanzar una misión tripulada a la Luna, incluso construir una base permanente en nuestro satélite. Este ambicioso plan necesita, para conseguirse, de mucha tecnología que se está desarrollando actualmente, y los especialistas chinos piensan que es mejor probar su tecnología antes de lanzar sus misiones.
La Luna artificial servirá para probar la tecnología que están desarrollando los científicos chinos, en entornos de baja gravedad prácticamente igual a la de la Luna. Los especialistas podrán ver de primera mano cómo se deforman los materiales en las condiciones de la Luna, así como el tiempo de resistencia de los mismos.
La idea es aprovechar esta Luna artificial para evitar problemas, y poder probar sin demasiado gasto y con mucho mayor control la tecnología que actualmente se mantiene en desarrollo.
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