En una visita a Ucrania, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se ofreció a celebrar una cumbre entre Ucrania y Rusia mientras los líderes de la UE intensificaban su contacto con el Kremlin para disipar los temores de que Moscú pudiera invadirlo.
La ofensiva diplomática se produjo cuando Rusia acusó a Estados Unidos de aumentar las "tensiones" al enviar 1.000 soldados a Rumania y 2.000 a Polonia para reforzar el flanco oriental de la OTAN.
Mientras Moscú se niega a retirar más de 100.000 soldados de las fronteras de Ucrania, los líderes de las potencias europeas Alemania y Francia dijeron que estaban considerando posibles visitas al presidente ruso, Vladimir Putin, en Moscú.
El presidente francés, Emmanuel Macron, tenía previsto mantener su tercera llamada telefónica en una semana con Putin más tarde el jueves y también hablaría con el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy.
Cumbre de paz entre Ucrania y Rusia
Las potencias occidentales se han involucrado en intensos esfuerzos diplomáticos, junto con la amenaza de sanciones contra el círculo íntimo de Putin, para disuadir cualquier ataque adicional contra la Ucrania exsoviética, a pesar de las enérgicas negativas de Moscú.
Erdogan, que sigue su propio camino diplomático, reafirmó en una reunión con Zelenskyy su oferta de organizar una cumbre de paz con Putin. El líder turco busca aprovechar su relación especial con Putin y su fuerte apoyo a Kiev para establecer conversaciones de paz.
Zelenskyy le agradeció los esfuerzos e insistió en que estaba “listo para hacer todo lo posible en todas las plataformas y en todos los formatos” para llevar la paz a Ucrania. Erdogan se ha convertido en un “mediador entre Ucrania y Rusia porque cree que puede hablar libre y francamente” tanto con Zelenskyy como con Putin.
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