Ramón Arellano Félix fue un narcotraficante mexicano que fungió como líder del Cártel de Tijuana hasta que fue asesinado. Hoy, se cumplen 20 años de este suceso que puso "contento" al narco Joaquín “El Chapo” Guzmán.
La muerte de Ramón fue histórica, ya que él junto a su hermano Benjamín debutaron en 2000 en la primera lista exclusiva de narcotraficantes extranjeros más buscados por Estados Unidos, que incluso los equipara en peligrosidad con el terrorista Osama Bin Laden, líder de Al-Qaeda.
Como te hemos dicho en las noticias, Ramón Arellano Félix fundó el Cártel de Tijuana durante los años 80. Dicho grupo criminal se caracteriza por su violencia y el trasiego de drogas hacia San Diego, California, y hasta el oeste de Canadá, según la Administración de Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés).
El asesinato de Ramón ocurrió el 10 de febrero de 2002, cuando el capo fue acribillado por armas de fuego por varios polícias mientras se encontraba disfrazado de agente de la extinta Procuraduría General de la República (PGR), en pleno carnaval de Mazatlán, Sinaloa.
¿Cómo fue la muerte de Ramón Arellano Félix?
Fue Benjamín Arellano Félix, quien en 2021 salió de la cárcel, el que confirmó cómo murió su hermano, cuando fue detenido por el Ejército durante marzo de 2002.
Los Arellano Félix construyeron túneles que cruzaban la frontera y corrompieron a autoridades mexicanas e incluso a algunas de Estados Unidos, afirma el investigador Raúl Benítez Manaut, del Centro de Investigaciones sobre América del Norte (Cisan) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“El cártel fue importante en su época de esplendor. Ahora hay otra vez herederos de ese cártel generando gran violencia en Tijuana, otra vez se está volviendo a la gran violencia similar a la que hubo en los años 2008 y 2009", indica el experto.
Cabe destacar que cuando Ramón fue asesinado, el presidente de México de esa época, Vicente Fox, calificó el suceso como "un gran triunfo", especialmente porque Benjamín fue capturado al poco tiempo.
Algo que muchos saben es que el fallecido narcotraficante tenía una gran rivalidad con otros peligrosos capos de la época: Joaquín "El Chapo" Guzmán e Israel "El Mayo" Zambada, líderes del Cártel de Sinaloa.
Incluso se dice que El Chapo "disfrutó la muerte" de Ramón Arellano Félix y siente que "si algo le dio gusto, fue haberlo matado", ya que se adjudica haberle tendido la trampa en Sinaloa, según reveló en noviembre de 2018 Jesús Zambada García "El Rey", primer gran testigo de Washington en el caso contra Guzmán. Hasta ahora, no se sabe si realmente Guzmán fue el responsable de la muerte de su rival.
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