La administración de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) presentó varios megaproyectos que se harían durante el sexenio y el primero de ellos ya fue entregado y se encuentra en uso; hablamos del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), el lugar que ha desatado opiniones encontradas.
El PRI, PAN, PRD y MC, son los principales críticos de las construcciones, mismas que incluye la Refinería Dos Bocas en Tabasco, el Tren Maya y el Tren Transístmico, ya que dichos partidos han visto una considerable reducción en sus recursos desde que el tabasqueño llegó al poder de la mano de Morena.
las noticias dimos a conocer que el nuevo aeropuerto contó con 20 operaciones en el día de su inauguración, movilizando a dos mil 22 pasajeros a distintos destinos.
Pese a las críticas, los militantes de Morena insisten en que los megaproyectos propuestos en la administración de López Obrador, son necesarios para el mejor desarrollo en México, ya que impulsarán la conectividad internacional.
Los defensores del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) señalan que la única manera en la que se puede dar una crítica objetiva, es usándolo, teniendo una experiencia en él, aunque esto resulta complicado pues hay más de 126 millones de mexicanos pero sólo 4.
6 millones de ellos viajan en avión.
Un artículo de El Financiero señaló que entre las cosas que son notorias es la limpieza existente, ya que el AICM tiene una evidente carencia de mantenimiento, principalmente en la terminal aérea ubicada en la alcaldía Venustiano Carranza.
Otro beneficio son las dimensiones y costos; el boleto de avión tiene los mismos costos en ambos aeropuertos, aunque el costo de estacionamiento por día en el AIFA cuesta menos de la mitad que en el AICM, aunque los precios bajarían todavía más.
En las observaciones que se hicieron, fue la mala reputación que tienen en redes sociales, por lo que el gobierno federal tiene la necesidad de subirlo de categoría para que pueda tener vuelos internacionales.
Por su parte, Kenia López Rabadán, quien es senadora del Partido Acción Nacional (PAN), dijo que el nuevo aeropuerto es un simple capricho del presidente de México, pues no cumple con las necesidades de movilidad en una de las urbes más grandes de América Latina.
“Entre lo pagado en Texcoco, lo que costó su cancelación y lo gastado en Santa Lucía, el capricho presidencial saldrá en más de 400 mil millones de pesos”.
Se basa en el concepto de sencillez que tiene el objetivo de adaptarse al plan de austeridad del actual gobierno de México; tenía el objetivo de la innovación, funcionalidad y eficiencia de todos los componentes que quieren proporcionar los servicios dignos.
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