El secreto de los Reyes Magos: ¿cómo revelar la verdad a tu hijo?

Cuando los niños crecen comienzan a tener dudas sobre los , con estos podrás afrontar la verdad de la mejor manera.



En México y varias partes del mundo se tiene la tradición de que los niños reciban por parte de los Reyes Magos, quienes llegan la madrugada del 6 de enero.

Los pequeños esperan con muchas ansias e ilusión ese momento en el que abren sus obsequios que se encuentran debajo del árbol, como lo hicieron hace un par de semanas con la Navidad.

Pero cuando los niños crecen, esta historia toma un giro diferente y ya es momento de decirles la verdad.

Si no sabes como hacerlo, en las noticias te damos algunos tips que todo padre de familia debe saber.

Los Reyes Magos representan una gran ilusión para los niños, quienes los esperan con mucho en sus casas cada 6 de enero, después de dejarles su carta en un zapatoSin embargo, hay un momento durante su crecimiento en el que aparecen ciertas dudas relacionadas a estos relatos que sus padres les contaron, y comienzan a plantearse algunas interrogantes que desvanecen la magia de la tradición.

De acuerdo con la experta Verónica Domínguez, psicóloga especializada en la interdisciplina en salud mental y niños, niñas y adolescentes, este es un tema complicado de tratar pero que se puede hacer de la mejor manera.

“Las figuras como Papá Noel y los Reyes Magos permiten un despliegue de fantasía en niñas y niños pequeños, lo cual cambia conforme van creciendo”, dijo.

En ocasiones estas dudas hacen que los pequeños busquen respuestas por su cuenta, descubriendo solos que los Reyes Magos son en realidad los adultos encargados de su cuidado.

De acuerdo con los especialistas, el mejor momento para abordar el tema es justo cuando los niños ya comienzan a hacer preguntas al respecto.

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“Es bueno partir de sus preguntas e inquietudes para conversar al respecto, de esta forma no lo sentirán como una mentira”, explicó.

Lo recomendable es prestar atención a su reacción posterior para actuar de forma inmediata y certera, de esta forma la desilución no durará mucho ni se sentirá en extremo.

Lo más normal es que reaccionen de forma triste o incluso molesta ante la verdad de los Reyes Magos, pero es el momento perfecto para poner manos a la obra y trabajar un adecuado desarrollo de la afectividad, del contacto con la realidad y su pensamiento.

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“También los adultos debemos empezar a cuestionarnos de qué modo sostenemos y transmitimos el relato de los Reyes Magos”, finalizó.

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