Ojalá pudiéramos visitar a nuestro estilista cada vez que vemos que el color se está yendo de nuestras raíces.
Pero como no siempre es posible, el cuidado que debemos tener para con nuestro cabello pintado es esencial para que luzca bien.
La buena noticia es que existen muchas estrategias comprobadas para prevenir los efectos secundarios de una visita pospuesta al salón.
Todo comienza con la implementación de buenos hábitos para el cabello y un poco de mantenimiento en el hogar.
En las noticias te compartimos más sobre esto.
Si existen los shampoos para cabellos coloreados o con mechas por algo será.
Alma Luzón, estilista y directora del salón Alma Luzón de Madrid, nos explica que "cuidar el pelo teñido con productos específicos, sin siliconas ni sulfatos, ayuda a alargar la duración del color y mantener su brillo".
Los shampoos sin sulfatos protegen los aceites naturales del cabello para mantenerlo hidratado.
Y también son buenos los productos con ingredientes como la quinoa, las proteínas de trigo y el extracto de semilla de girasol, para ayudar a prolongar el color del cabello.
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Una de las claves para que el tinte de cabello te dure más es, según Meritxell Walias, responsable del salón WM de Treatwell, "tener el cabello sano, cuidado y bien hidratado.
Cuanto más poroso (seco) esté, menos durabilidad tendrá el color, principalmente en medios y puntas.
La hidratación evita la oxidación del pigmento".
Para hidratar el pelo tendrás que utilizar, al menos una vez a la semana, una mascarilla para cabellos teñidos o secos.
No se trata de llevar el pelo sucio, pero cuanto más lo laves, menos te aguantará el tinte de cabello.
De hecho, el colorista de eSalon Stephanos A.
aconseja "esperar uno o dos días después de aplicar el color para lavarse el cabello para que el pigmento tenga la oportunidad de asentarse en los folículos.
Y después, lavarlo solo cuando de verdad esté sucio.
Lavarse con demasiada frecuencia el cabello puede causar que el color se desvanezca más rápido".
Ya sabes que hay algunos trucos que te ayudarán a espaciar los lavados, como utilizar champú en seco, adoptar ciertos peinados (coletas, trenzas, recogidos.
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) o usar accesorios como diademas.
Además, a la hora del lavado tienes que tener en cuenta otra cosa importante: hay que evitar lavarlo con agua caliente si quieres que el tinte de cabello dure más.
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Meritxell Walias, del salón WM de Treatwell, señala que "el agua caliente abre la cutícula y deja el cabello más poroso, influyendo negativamente en la durabilidad de la coloración.
Lo ideal es lavarlo con agua templada con un último aclarado con agua fría para cerrar la cutícula del cabello".
El verano es un gran enemigo del pelo teñido, porque, además del sol, hay otros dos factores, como son el cloro y la sal del mar, que estropean mucho el tinte de cabello.
Pero en invierno también deberás proteger tu pelo del sol, y otras inclemencias del tiempo como el frío o el viento, usando gorros y sombreros.
Así mismo, las herramientas de calor "afectan a la deshidratación y tienden a abrir las hebras del cabello.
Las altas temperaturas de las herramientas térmicas y su mala ejecución por uno mismo sin un protector adecuado dañan el ", según la estilista Alma Luzón.
Recuerda usar siempre un protector térmico antes de usar el secador, las planchas o el rizador.
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