Mohammad Mehdi Karami, campeón nacional de karate, y Seyed Mohammad Hosseini, entrenador infantil, fueron ejecutados por el régimen de Irán, tras su participación en una serie de protestas que sacuden al país persa.
De acuerdo con información reportada por varias agencias internacionales, Karami y Hosseini fueron ahorcados por presuntamente haber asesinado a un miembro de la fuerza paramilitar Basij, el pasado 3 de noviembre.
Mohammad Mehdi Karami, de 21 años de edad, practicaba karate desde que tenía 11 y era considerado uno de los destacados en su disciplina dentro del país; incluso, ganó diversos títulos nacionales.
La condena de Mohammad Mehdi Karami llegó apenas cinco días después de que arrancó el juicio; incluso, Amnistía Internacional puntualizó que el proceso no fue “nada parecido a un procedimiento judicial significativo”.
En otro caso, el futbolista iraní Amir Nasr Azadani fue condenado a 26 años de cárcel por un tribunal revolucionario, por el supuesto asesinato de tres miembros de las fuerzas de seguridad y otros dos delitos cometidos durante las protestas que sacuden el país desde septiembre.
Otros tres implicados en el asesinato de los tres basijis -milicianos islámicos- en la ciudad de Isfahan a mediados de noviembre fueron condenados a muerte y otro más a dos años de prisión, informó la agencia Mizan, adscrita al Poder Judicial.
El caso de Azadani se volvió viral y provocó críticas en todo el mundo, luego de que diversas asociaciones de futbolistas y medios internacionales anunciaran en diciembre que había sido condenado a muerte.
Cabe mencionar que Amir Azadani militó en diversos clubes de Irán y durante las temporadas 16-17 y 18-19 lo hizo en el Tractor Sazi, equipo por el que acaba de fichar el técnico español Paco Jémez.
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