En Lurín, Perú, un presunto delincuente murió tras chocar un vehículo que había robado minutos antes y terminar calcinado en éste.
Los hechos dejaron un saldo de un muerto y un herido luego de la explosión de un vehículo en la avenida Lima que se encuentra en el distrito de Lurín, en el país andino.
El ladrón ya muerto, cuya identidad no se conoce, aparentemente era un ladrón que estaba siendo perseguido por los oficiales de policía cuando el suceso tuvo lugar.
Las autoridades indicaron que los hechos se dieron entre las 12:30 de la mañana y 1 am en una zona que se encuentra cerca al peaje de Conchán, donde el muerto y su cómplice robaron el automóvil de una pareja.
El hombre que vivió el asalto dijo que estaba reparando un desperfecto en su auto cuando él y su esposa fueron amagados con una pistola por delincuentes que se llevaron su automóvil.
Luego de escapar, los dos fueron descubiertos por agentes de la Policía Nacional de Perú quienes estaban en el sitio.
Se comenzó una persecución para atrapar a los ladrones y tras 10 minutos, el conductor del auto robado se distrajo y chocó contra una pared frontal de un tráiler que iba por el lugar.
Uno de los ladrones quedó atrapado entre los fierros torcidos y no escapó, lo que causó que muriera calcinado.
Sin embargo, el cómplice fue rescatado y llevado al Hospital General de Villa El Salvador, quien fue reportado como grave y sigue en el nosocomio, donde le diagnosticaron trauma de Shock y quemaduras.
El robo de automóviles es un delito de fuero común que daña al patrimonio de la población sin embargo igualmente es riesgoso por la interacción que este tiene con otros delitos ya sean como hurtos o asaltos, narcotráfico, fraude, trata, venta de autopartes y otros.
En Perú, este delito se produce en Lima, capital del país con 15 robos, y las denuncias superan las mil 50, de las que mil 200 son de robos reales.
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