Anoche se concretó una de las derrotas más dolorosas de México contra Estados Unidos, y es que si bien el combinado estadounidense ya ha vencido al en varias ocasiones, no lo había hecho frente a una selección con tan pocos argumentos futbolísticos, lo cual se vio reflejado en la frustración e impotencia de los jugadores mexicanos.
El partido terminó a favor de Estados Unidos, con goles de Christian Pulisic al minuto 37 y 46, el primero de ellos resultado de un balón retrasado por Edson Álvarez en un mal momento, que rebotó en las piernas de Jorge Sánchez, Pulisic aprovechó para mandarlo a la red.
El segundo gol llegó recién iniciado el segundo tiempo con un desborde que terminó en un centro preciso que convirtió en el 2-0.
Y, finalmente, el tercer gol llegó al minuto 78, conducto de Ricardo Pepi quien sacó al arquero azteca y definió por un lado, esto tras un gran pase filtrado de Sergiño Dest.
Un partido con varias jugadas antideportivas que resultaron en cuatro expulsiones, la primera de ellas a Cesar Montes por dar una patada sin balón a un jugador estadounidense luego de que este le robara la pelota.
A raíz de esa jugada comenzaron una serie de empujones que derivaron en la expulsión del mediocampista Weston McKennie, quien terminó con la playera rota tras encararse con Jorge Sánchez, para después dirigirse a las gradas besando su escudo.
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Ya en la recta final del encuentro, en un balón dividido por la banda, Edson Álvarez disputó un balón con fuera excesiva y empujó a un jugador, Sergiño Dest, este empujó a para después encararse con lo que derivo en la expulsión de Dest y Arteaga, y una tarjeta amarilla para Edson Álvarez.
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