Como si se tratase de un milagro, una mujer de 53 años se embarazó y logró dar a luz a su bebé, esto luego de 21 intentos fallidos y tras ser diagnosticada con “infertilidad La protagonista de esta historia es Helen Dalgish, de Dennistoun, Glasgow, quien por años intentó tener un bebé, pese a que fue diagnosticada con “infertilidad”.
Tantos eran los deseos de esta mujer de convertirse en madre que soportó 21 intentos para quedar embarazada, gastando casi 100 mil libras, es decir, casi 2 millones de pesos en los procedimientos médicos.
Ahora, tras varios años, Helen finalmente le pudo dar la bienvenida a su hija Daisy Grace.
Helen aseguró que después de 25 años renunció a su sueño de ser madre.
Ella se casó a los 20 años y a los 28 intentó tener un bebé con su esposo, pero tras varios intentos le diagnosticaron “infertilidad inexplicable”.
Tras varios análisis y pruebas, se reveló que Helen tenía un problema potencial en el posicionamiento del útero.
Ella y su esposo se sometieron a cuatro procedimientos de inseminación intrauterina, donde el esperma se coloca directamente en el útero, pero no tuvieron éxito y pasaron a la fecundación invitro.
Fue así que durante 20 años Helen tuvo que soportar múltiples intentos fallidos, a pesar de producir embriones de la más alta calidad.
Ella se preocupaba cada vez que los médicos le intentaban transferir los embriones a su útero, aseguró que el procedimiento era bastante doloroso.
Tras acudir a otros especialistas, le confirmaron a Helen que su útero estaba severamente inclinado, por lo que todas las transferencias de embriones habían sido en vano.
Desde este diagnóstico Helen se embarazó en tres ocasiones, pero sufrió abortos espontáneos cuando tenía 41 y 42 años.
Mientras Helen atravesaba todos estos procedimientos para embarazarse, su padre se enfermó y falleció, pero antes la alentó a intentar el procedimiento una vez más.
"Mi mamá dijo que debería hacer otro intento de embarazo.
Antes de que papá falleciera, él le dijo a ella '¿qué puedo enviarte del cielo?', y ella dijo 'por favor envíale un bebé'".
Fue así que Helen finalmente decidió intentarlo una última vez, semanas después la pareja finalmente recibió una prueba de embarazo positiva.
"Creo que mi padre debe haber tenido algo que ver con eso", aseguró Helen.
Eso no fue todo lo sorprendente, Helen con 53 años de edad desarrolló diabetes y preeclampsia, una condición que causa presión arterial alta durante el , sin embargo, logró dar a luz a una niña sana.
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