¿Cómo plantar una suculenta que no tiene raíces?

el arte de multiplicar tus suculentas sin raíces y aprende a hacer hijitos suculentos. ¡Haz crecer tu colección verde de forma fácil y divertida! 



Si eres de los que ama tener suculentas en casa y quieres multiplicar tus plantas sin andar comprando a cada rato, esta nota es para ti.

Nos vamos a adentrar en cómo sembrar suculentas que no traen ni un pelito de raíz.

Así que agarra tus tijeras de jardín y prepárate para hacer unos cuantos hijos suculentos.

Primero que nada, corta un pedazo de la suculenta madre, pero asegúrate de que tenga unos buenos cinco o 10 centímetros de largo.

¡Y no cortes al aventón! Hazlo justo debajo de un nodo, que es donde las hojas se juntan con el tallo.

 Después, pon tus recién cortados esquejes en un lugar bonito y déjalos ahí como por uno o dos días.

Esto ayuda a que la parte cortada se seque y forme una especie de callo, evitando que se ponga fea durante el proceso de enraizamiento.

Ahora, agarra un vaso de agua transparente y mételo al ruedo.

Asegúrate de que al menos un par de nodos estén bajo el agua.

Mete tus esquejes, cuidando de que al menos un nodo esté sumergido, pero cuidado con que las hojas no se den un chapuzón, porque eso podría arruinar la fiesta.

 Cambia el agua cada tanto para evitar que se ponga triste y para que tus esquejes se sientan en un ambiente limpio y acogedor.

Pues mira, no abuses con el agua.

A las suculentas les gusta la onda de "poca agua pero de calidad".

O sea, echa agua cuando veas que la tierra está seca, pero no le hagas el feo al drenaje, porque las suculentas odian tener los pies mojados todo el tiempo.

Mejor que se queden con sed un rato a que les caiga la inundación.

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