Una mujer llamada Stella Liebeck presentó una demanda en contra de McDonald's por lesiones sufridas cuando un café caliente se derramó en sus piernas, causándole quemaduras de tercer grado.
Los hechos ocurrieron en en 1992, cuando Stella Liebeck pidió una taza de café recién hecho en un autoservicio de McDonald's, en Albuquerque, Estados Unidos.
Su nieto, que conducía, se detuvo para que ella preparara con crema y azúcar su café.
Al no haber portavasos, Liebeck apoyó la taza entre las rodillas, pero derramó el café, lo que ocasionó que sufriera quemaduras de tercer grado.
Y es que, necesitó numerosos injertos de piel y cirugía para tratar las quemaduras que cubrían el 16% de su cuerpo.
En el caso de Liebeck, algunos argumentaron que ella era la responsable porque, en primer lugar, no debería haber equilibrado el café.
No obstante, gano una gran suma de dinero por daños y perjuicios, lo que equivale a unos 5 millones en dinero actual.
los tribunales consideraron que McDonald's tenía la culpa por servir un café muy caliente.
Más tarde, un juez redujo la indemnización de Liebeck.
De todos modos, la cifra fue millonaria.
En concreto, el éxito de marcas como McDonald's puede atribuirse al creciente deseo de disponer de comida asequible con un servicio rápido y en múltiples locales.
Especialmente la comodidad es la razón por la que McDonald's puede servir 6,5 millones de hamburguesas al día.
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