En una reciente iniciativa, senadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) han propuesto modificaciones a la Ley del Impuesto Sobre la Renta con el objetivo de hacer deducibles los gastos relacionados con los servicios de guarderías o estancias infantiles.
La propuesta se fundamenta en la realidad que enfrentan millones de madres y padres solteros en México, quienes se ven desafiados al conciliar la crianza de sus hijos con las responsabilidades laborales.
Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), más del 70 por ciento de los padres y madres trabajadores en México necesitan servicios de guardería para asegurar el adecuado cuidado de sus hijos durante su jornada laboral.
Los senadores priistas subrayan la importancia de hacer deducibles los pagos de servicios de guardería destinados a niñas y niños de cero a tres años de edad en la declaración de impuestos de los contribuyentes.
Argumentan que esta medida no solo fortalecerá la participación de los padres y madres en el ámbito laboral, sino que también contribuirá al desarrollo integral de los niños, sentando las bases para una sociedad más equitativa y próspera.
En el contexto de la propuesta, se destaca que el costo de los servicios de guardería puede llegar hasta ocho mil pesos por niño, un factor significativo a considerar al decidir incorporarse al mercado laboral.
Los legisladores del tricolor respaldan la propuesta al afirmar que permitir la deducción de impuestos por el pago de guardería es un acto de justicia elemental para los padres y madres de familia.
Enfatizan que esta medida proporcionaría un respaldo económico crucial para aquellos que asumen gastos en el cuidado infantil.
Al abordar la situación actual, señalan que de los más de 14 millones de menores de entre 0 y 6 años en México, solo 486 mil 032 han asistido a Centros de Atención Infantil (CAI) profesionales, distribuidos entre guarderías del IMSS, de la SEP, de PEMEX, del ISSSTE, así como unidades SEDIF, SMDIF o centros privados.
Los senadores del PRI subrayan que estas cifras reflejan la falta de acceso de millones de bebés y niños a un cuidado adecuado.
Indican que las guarderías públicas atienden apenas al 3 por ciento de los menores en ese rango de edad, mientras que solo el 1 por ciento lo hace en guarderías privadas, dejando al 96 por ciento restante bajo el cuidado principalmente de familiares, como abuelas o madres.
Para los legisladores, estas cifras evidencian que muchos menores están bajo el cuidado de familiares que carecen de elementos pedagógicos adecuados.
Además, resaltan que las mujeres asumen la carga de los cuidados sin recibir una retribución económica y ven limitado su tiempo para trabajar o estudiar.
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