Un vuelo de la compañía norteamericana, Delta Airlines, con destino a Detroit, Michigan, EE UU, tuvo que regresar al aeropuerto de Ámsterdam (Países Bajos) debido a que una "lluvia de gusanos" cayó desde el compartimento superior sobre los pasajeros.
A través de una entrevista, un portavoz de la aerolínea detalló que se trató del vuelo 133 AMS-DTW, que partió este martes pero que "fue interrumpido debido a una maleta de mano mal empaquetada", sin dar más detalles sobre lo ocurrido.
"El avión regresó a la puerta de embarque y los pasajeros fueron embarcados en el siguiente vuelo disponible", explicó Delta en un comunicado.
Según el medio The Guardian, "un pasajero que llevaba pescado podrido al avión en una bolsa de mano, lo colocó en un compartimento superior antes de que los gusanos se liberaran y llovieran sobre los pasajeros sentados debajo".
El incidente fue tachado de "asqueroso y desagradable", no obstante, la aerolínea compensó a los clientes por las molestias, aunque se desconoce la información sobre el importe o la forma de la compensación.
Uno de los pasajeros, Philip Schotte, holandés con residencia en Iowa, dijo a una cadena Fox local que vio al menos una docena de gusanos caer sobre una mujer en pleno vuelo.
"Realmente no sé lo que estaba pasando por mi mente.
Estaba tratando de procesarlo; el disgusto es una cosa, por supuesto", dijo, "tuvimos que esperar hasta que llegó la ayuda".
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