Claudia Sheinbaum Pardo, candidata presidencial de Morena, ha anunciado que si resulta electa, su estrategia para rescatar a Petróleos Mexicanos (Pemex), la petrolera más endeudada del mundo, incluirá una renegociación de la deuda y un enfoque hacia las energías renovables.
Durante una reunión con el Consejo de las Américas en Ciudad de México, Sheinbaum reveló que “Tenemos un plan para Pemex, que sé que preocupa a muchos, y que implica refinanciar la deuda como parte de un esquema más amplio y de largo plazo”.
Actualmente, Pemex sostiene una deuda que supera los 100 mil millones de dólares.
A pesar de las inyecciones financieras por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que ascienden a 1.
6 billones de pesos, la empresa enfrenta enormes presiones de sus acreedores a corto plazo.
La candidata enfatizó la importancia de preparar a Pemex para una transición hacia un modelo sostenible en el futuro próximo.
El enfoque propuesto por Sheinbaum incluye la diversificación hacia el mercado de las energías renovables y la cogeneración, además de facilitar el refinanciamiento de la deuda de Pemex.
Este plan pretende no solo enfrentar la crisis climática sino también adaptar a la petrolera estatal a los nuevos desafíos económicos y medioambientales globales.
Sheinbaum ha resaltado la relevancia de la cogeneración energética y el desarrollo de infraestructuras como parques industriales, lo cual podría beneficiar no solo a Pemex sino también impulsar proyectos nacionales de eficiencia energética.
Aseguró que su propuesta es viable y que se enfocará en un desarrollo a largo plazo, con una planificación que abarca los próximos 30 años y que está alineada con los objetivos de la Convención de Cambio Climático.
Las políticas fiscales aplicadas durante la administración de López Obrador incluyeron exenciones significativas y apoyos directos al estado, tales como exenciones en el pago de impuestos por el derecho de utilidad compartida (DUC) y la extracción de hidrocarburos.
Estas medidas, que en el último trimestre del año pasado representaron una evasión fiscal de 86 mil 640 millones de pesos según el Banco de México (Banxico), reflejan los esfuerzos del gobierno por estabilizar las finanzas de Pemex.
Además, Pemex ha reportado un incremento del 17.
3% en su deuda con proveedores y contratistas, llegando a los 163,207 millones de pesos a marzo de 2024.
A finales de 2023, la empresa reportó una deuda con proveedores de 359 mil 760 millones de pesos, la cifra más alta en años recientes, comprometiéndose a acelerar los pagos para mitigar estos pasivos.
El incremento de las obligaciones facturadas desde 2023 y proyectadas para 2024 suman un total de 162,881 millones de pesos, añadiéndose trabajos y materiales aún sin facturar por un valor de 326 millones de pesos.
Estos datos subrayan los desafíos financieros a los que se enfrenta la petrolera estatal.
Más allá de las deudas con proveedores, Pemex también maneja una deuda financiera que asciende a 106 mil 100 millones de dólares, pero ha demostrado esfuerzos continuos por cumplir con sus compromisos financieros.
En conclusión, el plan de Claudia Sheinbaum para Pemex representa un cambio paradigmático hacia la sostenibilidad y la innovación.
Su éxito no solo dependerá de la capacidad de la próxima administración para implementar estas reformas, sino también de la receptividad de los mercados y los acreedores a esta nueva dirección estratégica.
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