¡De niño de rancho a ídolo de México! Así fue la difícil infancia de Pedro Infante

Pedro Infante estuvo rodeado de músicos y melodías en su casa de Mazatlán



Pedro Infante, la voz y el rostro que conquistaron a , nació en Mazatlán, Sinaloa, el 18 de noviembre de 1917.

Su entorno familiar estuvo marcado por la música, ya que su padre, Delfino Infante García, era músico.

Esto despertó en el joven Pedro una temprana inclinación por el arte sonoro.

A pesar de las limitaciones económicas, su pasión no decreció.

De manera autodidacta, Infante aprendió a tocar la guitarra, dando sus primeros pasos en el mundo de la música.

Para su adolescencia, a los 16 años, el talento musical de Pedro Infante ya era reconocido en su natal Sinaloa.

Su voz privilegiada y su carisma natural lo llevaron a integrarse a agrupaciones locales como la Orquesta Estrella de Culiacán.

Si bien la necesidad familiar lo obligó a trabajar en diversos oficios, incluyendo la carpintería,la música siempre fue su verdadera vocación.

Esta pasión lo impulsó a buscar nuevos horizontes en la Ciudad de México, donde su carrera artística tendría un despegue meteórico.

Pedro Infante se convirtió en una leyenda del cine mexicano, protagonizando películas que hoy son clásicos nacionales.

Su filmografía incluye joyas"Nosotros los Pobres" (1948): Dirigida por Ismael Rodríguez, esta cinta explora valores como la dignidad y la solidaridad.

Infante interpreta a Pepe El Toro, un personaje que se ganó el corazón del público.

"Ustedes los Ricos" (1948): Secuela de "Nosotros los Pobres", continuando la historia de Pepe El Toro y su lucha contra las adversidades.

"Pepe El Toro" (1953): Cierre de la trilogía de Pepe El Toro, consolidando este personaje como un ícono del cine mexicano.

"A Toda Máquina" (1951): Comedia donde Infante interpreta a un carismático oficial de tránsito.

"La Oveja Negra" (1949): Película que aborda temas de rebeldía y conflictos entre generaciones.

"Los Tres García" (1947): Comedia donde Infante encarna a uno de los nietos reunidos por su abuela para vengar el honor familiar.

"Vuelven los García" (1947): Secuela de "Los Tres García", donde las aventuras de los nietos continúan.

Pedro Infante logró capturar la esencia de lo mexicano, representando la masculinidad, el honor, la sensibilidad y el carisma.

Sus películas no solo son un deleite artístico, sino un testimonio de las inquietudes y aspiraciones de la sociedad mexicana de su época.



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