La tranquilidad de Altamirano, , se vio sacudida por un acto de violencia que ha generado conmoción en la región.
María García López, presidenta concejal del municipio, fue víctima de un secuestro perpetrado por hombres que, haciéndose pasar por agentes de la ley, la privaron de su libertad junto con dos acompañantes.
El incidente tuvo lugar el jueves 25 de abril en el Barrio Guadalupe del municipio de Ocosingo.
Según las autoridades, un grupo de individuos, presuntamente pertenecientes a la Policía Especializada, abordaron a García López y a sus acompañantes mientras se encontraban cerca de un restaurante en la carretera internacional Ocosingo a San Cristóbal.
Posteriormente, fueron llevados con rumbo desconocido a bordo de dos vehículos.
Fiscalía General del Estado de Chiapas ha iniciado una investigación exhaustiva sobre este preocupante suceso.
A través de la Fiscalía de Distrito Selva, se están recabando testimonios y evidencias para esclarecer los hechos y dar con el paradero de García López y sus compañeros.
Es importante destacar que la Fiscalía ha aclarado que los individuos responsables del secuestro no son elementos de la Policía de Investigación de la dependencia estatal.
Este detalle agrega una capa de misterio y complejidad a un caso que ya de por sí es alarmante.
Además del secuestro de la presidenta concejal, se ha reportado la privación de la libertad del hermano de García López en un incidente separado.
Aunque esta información ha circulado en redes sociales, la Fiscalía aún no ha confirmado oficialmente este otro secuestro.
La situación ha generado preocupación en la comunidad y en la región circundante.
La incertidumbre sobre el paradero y el bienestar de los secuestrados ha dejado a muchos habitantes de Altamirano y sus alrededores con un sentimiento de inseguridad y temor.
La reportera Gabriela Coutiño ha proporcionado detalles adicionales sobre el incidente, señalando que García López y sus acompañantes están siendo retenidos por un grupo armado en Ocosingo, mientras que en Chicoasén también retienen al hermano del presidente con licencia y a otra persona.
Estos desarrollos subrayan la gravedad de la situación y la necesidad de una respuesta rápida y efectiva por parte de las autoridades.
En un contexto donde la violencia y el crimen organizado aún representan desafíos significativos para el estado de Chiapas y para México en su conjunto, es fundamental que se tomen medidas enérgicas para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos y para asegurar que se haga justicia en casos como este.
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