A medida que México se prepara para las elecciones más grandes de su historia, el espectro del narcotráfico se cierne ominosamente sobre el proceso democrático.
La violencia política perpetrada por el crimen organizado ha cobrado un precio sangriento, dejando en su estela un rastro de aspirantes asesinados y municipios sin contendientes para los cargos públicos.
Este sombrío panorama plantea una pregunta crucial: ¿puede el narcotráfico poner en riesgo las elecciones de México en 2024?Con al menos 30 aspirantes a cargos de elección popular asesinados hasta la fecha, la violencia electoral ha alcanzado proporciones alarmantes.
En lugares como Maravatío, Michoacán, la brutalidad de los carteles dejó a la población sin opciones viables, con los dos candidatos principales ejecutados apenas horas de diferencia.
Este clima de miedo y coerción ha llevado a la consultora de seguridad Global Guardian a emitir un informe revelador sobre las amenazas que acechan al proceso electoral actual.
Según Global Guardian, estas elecciones se perfilan como las más violentas en la historia democrática del país.
La normalización de la violencia política, combinada con décadas de políticas de seguridad ineficaces, ha creado un caldo de cultivo para la intervención del crimen organizado.
Secuestros, agresiones, intimidación y asesinatos son solo algunas de las tácticas utilizadas por estos grupos para influir en el resultado electoral.
Aunque no se sugiere que los grupos criminales puedan impedir la realización de los comicios, su capacidad para influir en los resultados es motivo de gran preocupación.
Sobornos, financiamiento ilícito de campañas políticas e intimidación son solo algunas de las formas en que pueden ejercer su influencia sobre el proceso democrático.
El informe de Global Guardian identifica a varios estados como especialmente peligrosos para los políticos locales, entre ellos Chiapas, Oaxaca, Veracruz, Guerrero, Michoacán, Guanajuato y Puebla.
En estos lugares se han registrado más de 125 casos de ataques contra funcionarios entre 2018 y 2022.
Jalisco, Tamaulipas, San Luis Potosí, Estado de México y Morelos también figuran en la lista, con entre 100 y 124 agresiones en el mismo periodo.
México se encuentra entre los lugares más mortales para los políticos locales en todo el mundo, según el informe.
Además de la violencia perpetrada por los carteles, Global Guardian identifica otros tres riesgos potenciales para el proceso electoral.
La legitimidad de los resultados podría verse comprometida por la corrupción y la desinformación, generando dudas sobre la transparencia del proceso.
El malestar social también es una preocupación, ya que las tensiones podrían aumentar durante la jornada electoral o después de esta.
Por último, las movilizaciones de grupos de interés podrían desencadenar protestas ante posibles irregularidades, exacerbando aún más la inestabilidad política.
En resumen, el Violencia política: Morena y PAN, los partidos con más candidatos asesinados en 2024.
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